Antes de seguir a celebridades, 56 % de los encuestados prefieren seguir a personas normales en las plataformas digitales.
“La calidad y la autenticidad del contenido producido por los influencers son factores de primerísimo orden para los consumidores»
¿Las celebridades generan conexión con el público?
Un estudio realizado por Savanta y Bazaarvoice, revela que las celebridades están perdiendo su influencia en su audiencia, y que en su lugar otro tipo de influencers más “auténticos” han capturado el interés del consumidor. Estos resultados se obtuvieron tras encuestar a 9 mil consumidores distribuidos en Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Alemania, Australia y Francia.
Este trabajo investigativo revela también, que el 56 % de los encuestados prefieren seguir a personas normales en las plataformas digitales, personalidades con las que se puedan sentir identificadas. Y, en segundo lugar, el 34% apenas prefiere a los famosos, dejando al porcentaje restante entre expertos y estrellas de las redes sociales.
Aunque estas estadísticas no representen un gran golpe para el bolsillo de grandes artistas, sin duda refleja que las riquezas provenientes de la fama se están democratizando con el uso de las redes sociales. Otro dato revelador, es que el 86% de los consumidores busca reiteradamente “user generated content” (contenido generado por el usuario), para tomar una decisión al momento de comprar un producto que no han probado.
Adicionalmente y no por ello menos importante, se notó que el 80% de los consumidores asegura que los influencers deberían indicarle a su audiencia en caso de que estén utilizando o no filtros y herramientas enfocadas a la edición en los contenidos que desarrollan en los social media.
“La calidad y la autenticidad del contenido producido por los influencers son factores de primerísimo orden para los consumidores y en consecuencia deberían estar también en primer plano para las marcas a la hora de desarrollar campañas en el futuro”, señala Ed Hill, vicepresidente senior de Bazaarvoice en la región EMEA.